La pregunta es recurrente para aquellas novias que ven imposibilitado entrar en su vestido de novia soñado. Pero no se preocupen, existen muchos diseños que bien podrían suplir a su traje ideal.
Antes que nada debes tener presente el tipo de boda que quieres: íntima (solo padres, hermanos y algunos amigos), familiar (toda tu parentela y algunos amigos) o una gran recepción. Segundo, el lugar dónde lo realizarás, si es en la playa, en el campo, en la ciudad; si además es civil o religiosa o ambas. Tercero es la estación del año, solo así podrás elegir el indicado.
Elige tu vestido de acuerdo al mes de embarazo que llevas y al tamaño de tu barriguita. Si tu vientre es pequeño o tienes pocos meses puedes elegir uno de encaje, muy elegante, que puedes usarlo para la boda civil, independientemente de si es de día o de noche. Si por el contrario tu vientre es mayor, puedes optar por este otro que le da más espacio al bebé y luce ideal para una boda al aire libre.
Recuerda que no debes comprar el vestido que te gusta, sino aquel que te quede perfecto y te haga sentir cómoda (no olvides tomar en cuenta el tamaño de tu vientre para elegir el vestido); una vez elegido el vestido, combina los zapatos, la tiara o el accesorio que consideres necesario. Lo más importante para tener la boda de tus sueños es sentirte segura, cómoda y relajada; si a eso le sumas tener coordinado todo con tiempo, no tienes nada de qué preocuparte.